viernes, 31 de agosto de 2012

Impotencia. Ella.

Adiós. Gracias.

Esas fueron las últimas palabras cruzadas. Y ahora dejan de existir para el otro. Y no hay normalidad. Sólo pena. Y sólo las ganas de gritar...

"Siempre te echaré de menos. Joder. Nunca quise ese final. De hecho, nunca quise ninguno. Y la excusa barata que usé, más la miro, más la gasto releyendo, y más asco me da. Qué iba a querer nada. Contigo era todo. Pero supongo que no supe manejarlo. Y sí, tiene nombre: Gilipollas. Cobarde. Imbécil"

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